viernes, 25 de febrero de 2011

Final de mi Angel Nocturno

...Hacia donde  iras, que  rumbo  tomarás ahora que  tu misión en la  tierra  a sido  cortada por la hoz  de la  muerte? Pobre de ti, tomabas la decisión de  dejar atrás  tu condición de ser  mágico  y  espiritual,  justo en el  momento en que  tu amada  tomaba la decisión de  terminar  con su  vida para  poder estar  junto a ti  en el  plano de la eternidad, luchaste  años contra ese  sentimiento que los  humanos llaman amor, contra el deseo que poco a poco  te  humanizaba  y  te  hacia descender  del  cielo al cual estabas  ligado, aun cuando  tu  corazón  te llevaba  a ella, a  su piel  a sus  labios a  su respiración la  cual  despertaba en  ti  emociones y  sensaciones  que  ni  con  la inteligencia divina lograbas entender.
Sangre, esa que  tu decidiste  tener, compartir, ofrecer por ella, esa misma que  cubría de un tono escarlata la cama en la  que  experimentaste el elixir de la sexualidad, la fricción de dos cuerpos excitados, húmedos por el sudor, agitados; conociste los  besos, sentiste por primera  vez el cálido roce de sus  labios pasando por los  tuyos, sus manos unidas agarradas  por el temor de que algo los separase en tan mágico momento. Esa misma cama en la que escuchaste mil te amos. Y  ahora que  queda allí?  Que queda de ella, solo recuerdos, momentos, escenas.
Porqué, porqué no le conté mi  deseo de  hacerme  humano por ella?, esa es la  pregunta que da mil y un vueltas en tu cabeza, que  te enseña ahora lo que es el dolor, la tristeza, la soledad, la  rabia, y te lleva a  maldecir por  primera  vez.
Amado mío, (oyes desde lo lejos); nuestras decisiones han hecho que  el destino logrará al  fin su cometido, separar  nuestras almas, solo queda  recordarte y darte mi eterno amor ya que es lo único que queda en mi, y el mas largo y doloroso  adiós.
Ahora vagas en las noches buscando una estrella, un lucero que se le parezca a tu amada, a ese  rostro blanco como la  luna; por ahora solo puedo decirte suerte  mi querido caminante nocturno, mi eterno compañero, suerte en este camino de  dolor que decidiste tomar y al que muchos  llaman… VIDA.

Julieta, el Hada Oscura

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